Siguemee

lunes, 20 de febrero de 2012

Una selva en mi cabeza. Un tesoro en mi corazón.

 Me pierdo en mi propia selva, no encuentro ese tesoro que dijistes en su día que se encontraba entre arbloes y ramas escondido. Tesoro que me prometistes que ibas a encontrar.
 Tu olor es incienso ardiendo, tu tacto es seda que consigue atravesar mi piel, moviéndose desde dentro y clavándose a mi pecho... Pero sólo cuando duermo, te veo en mis sueños, me tienes dando vueltas y vueltas de un lado a otro. Pero sólo escucho tu respiración en algún lugar en mi sueño, me tienes dando vueltas y vueltas de un lado a otro... pero sólo cuando duermo.Y cuando despierto del sueño tus sombras desaparecen, tu respiración es sólo niebla marina rodeando mi cuerpo. Trabajo por el día, pero cuando es el momento de descansar me tiendo en mi cama, escuchando mi respiración desfallecer por el horizonte... Pero es sólo mientras duermo, te veo en mis sueños, me tienes dando vueltas y vueltas de un lado a otro. Pero sólo escucho tu respiración en algún lugar en mi sueño, me tienes dando vueltas y vueltas de un lado a otro... pero sólo cuando duermo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cada uno de mis lectores habéis hecho posible que este blog continúe, pese a varios "parones" que ha habido.
Y como me seguís interesando me encantaría que compartierais vuestras ideas para mejorar este 'mundo internauta' juntos