Siguemee

sábado, 18 de febrero de 2012

Leer, Capitulo 43; Escepto...

Un momento más tarde Patch tomó un lugar en la mesa a mi lado. Sus manos vagamente entre sus rodillas y manteniendo su constante mirada en mí. - ¿Qué? - Dije sintiéndome bajo el peso de su mirada. Él sonrío. - Estaba recordando los zapatos de tiburón. La otra noche. Tengo el usual Patch-inducido aleteo en mi estómago, y como es usual, no puedo distinguir si eso es una cosa buena o mala. - ¿Cómo estuvo tu noche? - Le pregunté, mi voz cuidadosamente neutral como si pudiese romper el hielo. Mis aventuras de espionaje aún colgaban incómodamente entre nosotros. - Interesante, ¿y la tuya? - No mucho. - La tarea fue brutal, ¿huh? Él se estaba burlando de mí. - No hice la tarea. Él tenía la sonrisa de un zorro. - ¿Con quién lo hiciste? Sin palabras por un momento. Me quedé ahí con mi boca levemente abierta. - ¿Fue eso un sarcasmo? - Solo curiosidad de lo que mi competencia es.
- Madura. Su sonrisa se estiró. - Afloja.
- Ya estoy caminando en delgado hielo con el Entrenador. Entonces, hazme un favor y concéntrate en el trabajo. No estoy de humor para jugar a probar al sujeto. Entonces, si no te importa… - Miré convergentemente a la mesa. - No puedo. - Él dijo - No tengo corazón. Me dije a mí misma que no estaba siendo literal. Me bajó a mí misma sobre la mesa y puse mis manos en mi estómago. - Avísame cuando hayan pasado los cinco minutos. Cerré mis ojos preferentemente para no ver los negros ojos de Patch examinarme. Unos minutos más tarde abrí mis ojos un poco. - El tiempo pasó. - Dijo Patch.
Levanté una muñeca hacia arriba para que él pudiera tomar mi pulso. Patch tomó mi mano y una sacudida del corazón se disparó por el brazo y terminó con un apretón en el estómago. - El pulso del sujeto se incrementa al contacto. - Él dijo. - No escribas eso. Se suponía que tenía que sonar indignada. Sonó como si estuviera reprimiendo una sonrisa. - El Entrena
- ¿Qué quieres? - Le pregunté. Los ojos de Patch se conectaron con los míos. En el interior, él estaba sonriendo. Lo podía decir. - Excepto, ya sabes, que... - Dije.
Después del colegio volví a la oficina de la Señorita Greene para nuestra cita programada al final del día escolar. El Dr. Hendrickson siempre tenía la puerta abierta en señal de invitación no verbal para los estudiantes que paraban. Cada vez que pasaba por este tramo del pasillo ahora, la Señorita Greene tenía la puerta cerrada. Todo el camino, el no perturbar estaba implícito. - Nora. - Ella dijo abriendo la puerta después de que yo golpeara - Por favor, entra. Toma asiento. Su oficina estaba totalmente sin cosas empaquetadas y decorada hoy. Trajo varias plantas más, y un panel de grabados de plantas enmarcadas colgando en una fila en la pared por encima de su escritorio. La Señorita Greene dijo: - Estuve pensando mucho en lo que dijiste la semana pasada. Llegué a la obvia conclusión de que nuestra relación necesita ser construida en la confianza y respeto. No discutiremos acerca de tu padre de nuevo, a menos que tú lo especifiques.
- Está bien. - Dije en alerta. ¿De qué íbamos a hablar? - Escuché algunas noticias bastante decepcionantes. - Dijo ella. Su sonrisa se desvaneció y se inclinó hacia adelante descansando sus codos en el escritorio. Estaba sosteniendo un lapicero, y ella lo hizo rodar entre sus palmas - No me quiero meter en tu vida privada, Nora, pero pienso que dejé perfectamente clara mi preocupación por tu relación con Patch. No estaba muy segura de a dónde se dirigía con esto. - No lo tutoreé. Y, realmente, ¿era algo de esto su asunto? - El sábado por la noche Patch te llevó hasta tu casa de Delpic Seaport. Y tú lo invitaste adentro de tu casa. Luché por mantener ahogada la protesta. - ¿Cómo sabe eso? - Parte de mi trabajo como psicóloga escolar es orientarte. - Dijo la Señorita Greene - Por favor, prométeme que vas a ser muy, muy cuidadosa, cuando estés alrededor de Patch. - Ella me miraba como si de verdad esperara que le diera mi palabra de promesa. - Es un poco complicado. - Dije - La persona que me iba a llevar me dejó plantada en el Delpic. No tuve opción. No es como si yo buscara oportunidades de pasar tiempo con Patch. Bueno, excepto por anoche en el Borderline. En mi defensa, honestamente no esperaba ver a Patch. Supuestamente tenía que tener la noche libre. - Estoy muy contenta de escuchar eso. - La Señorita Greene dijo, pero no sonaba totalmente convencida de mi inocencia - Con eso fuera del camino, ¿hay algo más de lo que te gustaría hablar hoy? ¿Algo que esté en tu mente? No le iba a decir a ella que Elliot irrumpió en mi casa. No confiaba en la Señorita Greene. No podía poner mi dedo en eso, pero algo acerca de ella me molestaba. Y no me gustaba la manera en que ella se mantenía insinuando que Patch era peligroso pero no me decía por qué. Alcé mi mochila del suelo y abrí la puerta. - No. - Dije.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cada uno de mis lectores habéis hecho posible que este blog continúe, pese a varios "parones" que ha habido.
Y como me seguís interesando me encantaría que compartierais vuestras ideas para mejorar este 'mundo internauta' juntos